Esta semana santa Campo Alegre ha organizado una excursión de tres días. A la convocatoria acudimos seis clientes. Fue un grupo bien avenido y, sobre todo, muy divertido. Éramos la mayoría habituales, si bien también contamos con una nueva adquisición, que creemos volverá con nosotros.
El “campamento base” se encontraba en San Martín de la Virgen del Moncayo. Situación estratégica para nuestro propósito. ¿Que era cuál? … Subir, bajar, recorrer, explorar, disfrutar. Y conseguimos todo ello. Personalmente, lo que me resultó más sorprendente fue el primer día. Al ser el de aproximación al Moncayo, saliendo desde Campo Alegre, Novallas, no esperaba que fuese de 10. Caramba si lo fue. El paisaje, los senderos y los “nuevos senderos”, léase el campo a través, son bonitos. Lo sabíamos. Pero lo que no nos figurábamos es que José Ángel, nuestro guía, optara por una ruta muy agreste y empinada [mi Garmin marcaba 20% de pendiente … ¿será posible?]. ¡Qué emoción y descarga de adrenalina! Impresionante todo.
El segundo día fue el de subir a la cima del Moncayo. Esto se explica solo. Que subidón … en todos los sentidos 🙂 . Me encantó verme arriba de nuevo. Teníamos vistas, ya que el tiempo nos acompañó los tres días. El tercer día fue más corto. Lástima. Precioso también. Me gustó particularmente que fuéramos a visitar la sima de Los Aines en Grisel. Muy curioso. Merece la pena ir. Fue día de vuelta a casa por caminos nuevos otra vez. ¿Cómo lo hará nuestro guía? No me canso de dejarme sorprender.